EN EL NOMBRE DEL PADRE, DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO, AMÉN
Evangelio de San Juan Jn 6, 44-51
“Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre”. Como Jesús de Nazaret, también tu eres el pan vivo bajado del “cielo”, salido de las manos de Dios, salido de la familia e iglesia para alimentar al hambriento no sólo de pan sino también de compañía, al hambriento de ser escuchado, al hambriento de Dios. Y porque somos obra del Señor, salidos de sus manos, nuestra vida tiene que ser un reflejo de tamaño artista. “El que coma de ese pan vivirá para siempre”, porque el pan que tu das no es soso ni endurecido ni tiene moho, es pan bueno hecho con los “granos” de tu entrega, los granos de tu servicialidad, los granos de tu gratuidad, de tu presencia, de tu paciencia, etc. Porque llevas vida, llevas alegría, llevas el evangelio, llevas al Señor; y si es a Dios a quien das, entonces entregas vida para siempre, si lo que ofreces es la amistad con el Señor, ¿qué más vida podemos esperar? Cuando llevas y entregas al Señor eres tú mismo quien se entrega, das vida, das testimonio, das ejemplo y abres caminos para el encuentro con Dios, con la vida.
Feliz día
El día a día de nuestra parroquia: agenda, actividades, noticias... todo los que vamos programando y se va viviendo. ......................................................................................................................ADELANTE, LA PUERTA ESTÁ ABIERTA...............................................................................................................................
No hay comentarios:
Publicar un comentario